En busca de generar una instancia de intercambio e interacción entre estudiantes del programa de doctorado con académicos UTEM y otros miembros de la comunidad universitaria, el Doctorado en Informática Aplicada a Salud y Medio Ambiente (DIASMA) inicia ciclo de Seminarios y Talleres del primer semestre de 2024.
“Estas actividades permiten conocer los distintos temas de investigación en que están trabajando los académicos que pertenecemos al claustro del doctorado y de los colaboradores externos de la universidad, lo que fortalece la vinculación con el medio”, explica Juan Francisco Marín Medina, académico del claustro y coordinador de Seminarios y Talleres del DIASMA.
La primera actividad será una doble sesión agendada para el miércoles 29 de mayo a las 10 horas, a cargo de dos académicos del claustro del doctorado: Mauricio Moncada y Raúl Arias, quienes tributan a la línea dos del doctorado, la cual aborda Química Computacional.
La primera charla, bajo el título “Química medicinal: Una búsqueda de fármacos contra enfermedades tropicales”, será dictada por Mauricio Moncada, académico con una línea de investigación que se centra en el diseño, síntesis y evaluación biológica de compuestos con actividad antiparasitaria, la que incluye la búsqueda de modelos biológicos de estudio y diseño de materiales poliméricos por aumento de biodisponibilidad.
Mientras que Raúl Arias, quien presentará “Era postgenómica: oportunidades en salud y medioambiente”, es doctorado en genómica integrativa y su investigación se enfoca en la caracterización de comunidades microbianas mediante el uso de técnicas de metagenómica.
Los seminarios que se irán desarrollando este semestre estarán vinculados a las líneas de investigación del doctorado (Biología computacional, Química Computacional y Tecnologías Habilitadoras Digitales) y serán dictadas por miembros del claustro y otros académicos externos.
A través de estas instancias, las/os estudiantes del programa conocen las investigaciones que hacen los profesores que pueden guiar sus tesis de doctorado. “En 2023, por ejemplo, teníamos 4 estudiantes y este año se sumaron 6, en total son 10 estudiantes. Varios de los nuevos no necesariamente tienen un tema de tesis definido, y estas instancias permiten aclarar estos asuntos. También es un espacio propicio para que las y los estudiantes interactúen con otros profesores miembros del claustro y se den cuenta si existen lazos entre líneas de investigación”, indica Marín.
Finalmente, el académico añade que “esperamos que este año podamos desarrollar talleres y cumplir con ese sueño que tenemos que sea un ciclo más extenso y así contribuir al desarrollo de los estudiantes de forma más transversal”.